¿Qué tal si deliramos por un ratito?
¿Qué tal si clavamos los ojos más allá de la infamia para adivinar otro mundo posible?
El aire estará limpio de todo veneno que no provenga de los miedos humanos y de las humanas pasiones...
En las calles los automoviles serán aplastados por los perros...
La gente no será manejada por el automovil, ni será programada por el ordenador, ni será comprada por el supermercado, ni será, tampoco, mirada por el televisor.
El televisor dejará de ser el miembro más importante de la familia y será tratado como la plancha, o el lavarropas.
Se incorporará a los códigos penales el delito de estupidez, que cometen quienes viven por tener o por ganar en vez de... vivir por vivir nomás... Cómo canta el pájaro sin saber que canta y cómo juega el niño sin saber que juega.
En ningún país iran presos los muchachos que se nieguen por cumplir el servicio militar, sino los que quieran cumplirlo.
Nadie vivirá para trabajar, pero todos trabajaremos para vivir.
Los economistas no llamarán nivel de vida al nivel de consumo ni llamarán calidad de vida a la cantidad de cosas.